Esta semana fue para nosotros un poquito más complicada porque yo he querido retomar un poco mis salidas profesionales e invitaciones a eventos que recibo por el blog. Antes era fácil llevarlo dormido, pero yo estaba agotada. Ahora que ya tenemos horarios más normales, Lorenzo evidentemente necesita hacer lo que mejor hace: ser un bebé. Le encanta andar por todos lados descubriendo el mundo. Evidentemente en estos eventos, las bloggers no tienen (o no llevan) a sus hijos. Las que no tienen tal vez dirán, "qué horror ese bebé tan escandaloso" y yo, como su mamá, tomé una decisión: he aguantado mucho en mi vida bebés ruidosos, es momento que los demás tengan un poco de paciencia. Mi hijo es un bebé que tiene la gran fortuna de estar con su mamá todo el tiempo. Ya llegará el momento en que nos digamos adiós unas horas al día, pero por ahora, quiero festejar que lo tengo conmigo.
Este post no es para mostrar amargura, sino gusto por ver que mi hijo está creciendo tan rápido que no me doy cuenta. Es una gran alegría compartir todos los días con este pequeñito que me derrite con cada cosa nueva que hace. Esta semana aprendió a aplaudir y a bailar solito. Como mamá, no hay nada que me guste más que aprender de él y cómo va descubriendo al mundo.
Espero que tengan un feliz viernes, yo disfrutaré mi fin de semana con la mejor compañía: mi Lorenzo.
2 comentarios:
Tienes toda la razón, aquellas que se quejan poco importan, el que importa es tu hijo. Si yo pudiera traería a mi hijo a mi trabajo. Tú muy bien mientras se pueda =D
Muchas gracias Nadia!!! Voy a aprovechar que todavía lo tengo conmigo
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